No llores mi vida,
no me quedo agarrado en la orilla.
Va a ser solo un cambio de barca
pero sigo tu rumbo
corriente arriba,
no me quedo cansado en la orilla.
No iremos asidos de la mano
pero aún siento tu hombro
rozar mi mejilla,
no me quedo olvidado en la orilla.
Seguirán arrasando mis ojos
los sentires profundos
que antes nos unían,
no me quedo colgado en la orilla.
Cantaré nuestros himnos de siempre
entre voces más tiernas
y blanca armonía,
no me quedo callado en la orilla.
No tendré mi cabeza en tu pecho
pero sí seguiré
latiendo tu vida,
no me quedo parado en la orilla.
Aunque creas perderme de vista
no hace falta que grites
me tendrás cerquita,
no me quedo perdido en la orilla.
No llores,
no llores mi vida.
No me quedo anclado,
no me quedo a vivir en la orilla.
