Canto I
Luna,
luz de noche
penumbra de día.
Sonrisa plácida,
eterna,
reflejo y espejo.
Lejana y cambiante,
eres algo íntimo:
faro cierto,
ritmo cíclico,
sorpresa continua...
No sé si cómplice
o compañera
Canto II
Nunca me había asomado a la noche.
Solo te vi, luna, entre atisvos.
Un día me fijé en ti:
en tus ojos hondos,
agridulces.
Descubrí una mirada atrayente
y sentí miedo
de tu hechizo imantado...
de tu hechizo imantado...
pero rompiste las trabas
y me dejé en ti.
Fuiste tú, luna,
me echaste al riesgo,
a ese mundo distinto,
inseguro,
al caminar a tanteos.
Tu embrujo, luna,
desancló mi barca,
me quitó el miedo.
Me dio ojos para ver en lo oscuro,
sentidos para vivir las penumbras,
nostalgias de noche en el día,
piel fresca bajo el sol.
Canto III
Está la espera vacía.
No te veo, luna.
La luz es negrura,
el sentir, noche profunda,
el alba un retorno fatal
que me empujará a tu ausencia.
el sentir, noche profunda,
el alba un retorno fatal
que me empujará a tu ausencia.
Tu aparecer es siempre parcial:
cara de luz, toda en ojos;
cara oculta, intriga y misterio.
Tu ausencia, ni ojos, ni luz:
mi cara oculta que brota
invisible,
inestable,
sensación de vacío,
intensidad de misterio,
suspense que me sumerge
en ese yo sin terreno.
Algo me grita dentro
que es para volver,
pero ¿por qué te has ido?
Canto IV
Eres presencia total, luna,
y lo invades todo con tu luz tenue
hasta hacer brotar en brillo pálido
de la misma entraña oscura,
hasta llenar de sensaciones profundas
los últimos pliegues de mi noche.
Tu mirar hierático y tierno
se desliza en luz fría y sentimiento.
Llegas a mi piel y me estremeces
pero dentro me desbordas, me creces
como al agua del mar cuando te siente.
Esa secreta atracción de tu intensidad
me ha sacado de mí mismo
y al mirar hechizado tu sonreír permanente
me he sorprendido conmigo,
con mi adentro intenso
que solo aflora bajo tu luz velada.
Entonces ya no estás lejos.
Mi mirar es tenerte cara a cara.
Tu luz ya no es fría,
se convierte en caricia suave,
en profundo susurro
en intensa ternura.
Luna llena, te siento así
como si fueses mi alma.